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La Batalla del Rio de la Plata

La Batalla del  Rio de la Plata Publicado en "Las Publicaciones de Crazyman" del 14 de agosto de 2004
Alemania, como un producto de las restricciones impuestas por el Tratado de Versalles, habia desarrollado los acorazados de bolsillo, dentro de ellos estaba el Almirante Graf Spee, el cual se encontraba en el Atlantico Meridional en Septiembre de 1939, su comandante era el Capitan de Navio Langsdorff, este una vez recibida la autorizacion de iniciar su aventura corsaria, decidio trasladarse al Atlantico Sur donde podria interceptar las rutas comerciales, a diferencia del Mediterraneo donde podria encontrarse con gran parte de la Royal Navy.
El 13 de Diciembre de 1939 cruceros británicos se enfrentan al acorazado Graf Spee, que se refugia en Montevideo y es dinamitado por su comandante. Sus 1,039 tripulantes llegan a Buenos aires el 18. Su comandante, Hans Langsdorf, se mata de un balazo poco después de llegar a Buenos Aires.
La formación inglesa estaba comandada por el Comodoro Harwood, la cual el 2 de Diciembre se encontraba en Port Stanley (Islas Malvinas), el comodoro recibió información del Almirantazgo sobre el hundimiento del Doric Star y concluyo, despues de evaluar las condiciones del tiempo, posibles rutas, la mision encomendada al buque aleman y su velocidad, que podría estar cerca de Rio de Janeiro o del Rio de La Plata, enfilando hacia este ultimo. El acorazado alemán podía enfrentar fácilmente a la formación inglesa pues sus cañones principales de 280mm tenían un alcance de 28km, mientras que la mayor de las unidades inglesas el Exeter con sus cañones de 203mm solo alcanzaba 24Km; por lo anterior su estrategia seria mantener alejado al mayor de la formacion con los cañones principales y martillar los otros buques con el armamento secundario.
Febrero de 2004

Una de las mayores perlas de la ingeniería nazi, el acorazado "Admiral Graff Spee", será reflotado la próxima semana del lodo del Río de la Plata, donde yace desde que su capitán lo hundió en 1939. Un equipo multidisciplinar, formado por profesionales de Alemania, Reino Unido, Argentina y Uruguay, con el beneplácito del gobierno uruguayo y con financiación privada, intentarán el lunes 9 de febrero comenzar las tareas para reflotar el barco. Ideado como una veloz máquina de destrucción, el "Admiral Graff Spee" fue uno de los tres buques alemanes que recibieron el apodo de "acorazados de bolsillo" porque estaban muy bien armados y porque pesaban una tercera parte de los acorazados tradicionales, lo que les permitía una rápida huida. El "Admiral Graff Spee" también es excepcional porque "representa la única oportunidad que existe en el mundo de reflotar un acorazado que participó en la Segunda Guerra Mundial", según dijo en rueda de
prensa Héctor Bado, jefe de operaciones del proyecto.

El 13 de diciembre del 1939, cuatro meses después del inicio de la Segunda Guerra Mundial, el buque se enfrentó a 300 metros de la costa uruguaya, frente al actual centro turístico de Punta del Este, a tres buques aliados -dos británicos y un neozelandés- que lo buscaban para destruirlo. Sin atender los consejos de sus oficiales, que creían que lo más adecuado era adentrase en el Atlántico, el capitán del Graff Spee, Hans Langsdorff, decidió dirigirse a la bahía de Montevideo y amparándose en las leyes internacionales pedir cobijo a Uruguay, un país neutral.

Tras una serie de intrigas diplomáticas y sin haber agotado las 72 horas de auxilio a las que tenía derecho, el capitán decidió suicidarse y sacrificar el acorazado antes de enfrentarse a una supuesta flota británica, que nunca existió más allá del imaginario popular alentado por el embajador británico, Eugen Millington Drake. Langsdorff hizo explotar el acorazado, que ardió durante tres días antes de hundirse a ocho metros de profundidad en el lodo del Río de la Plata. "Unas 500.000 personas vieron hundirse el barco, no hay familia uruguaya que no tenga a alguien que lo viera", indicó Alfredo Etchegaray, promotor del proyecto. Aunque está previsto que el reflote completo del barco dure unos tres años, podría prolongarse ese periodo según "las condiciones en las que se encuentre el barco, ya que pueden obligarnos a mudar la técnica a utilizar", señaló Thomas Smid, un experto alemán que colaboró con James Cameron para realizar el filme "Titanic". Todas las piezas del navío serán restauradas y expuestas en Uruguay. "Creemos que va a ser un reclamo muy importante para el turismo", auguró Etchegaray. Uno de los aspectos que más curiosidad y espectación levanta es el de los explosivos.

Los medios de comunicación uruguayos han especulado sobre la posibilidad de que pudiera existir aún algún torpedo sin explotar, pero tanto el equipo, como el único sobreviviente alemán que reside en Uruguay, Friedrich Adolphe, consideran que de haberlo, estaría totalmente inutilizado. Sin embargo, Adolphe, de 85 años, prefiere no arriesgarse. Para él, el acorazado tiene que quedarse, donde está, anclado en el lodo del Río de la Plata: "Dejen tranquilo al Graff Spee", sentenció.

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